¿Que músicas escuchas en tu cocina?

Hoy me paré y me senté con vosotros a escuchar mis músicas.

Oigo los sonidos de los cacharros de fondo, alguien levantó las persianas, pasó un coche cuyo conductor debía haber dormido divinamente, por que compartía su música con todo el municipio, incluso el aire, si escuchas, tiene su propio sonido, así que parece que arranca el día y todo va adquiriendo su propia velocidad.

 En ese inicio que degusto lento y que me gusta saborear: el aparente silencio de la mañana y su música, mi mente vuelve al conductor “disruptivo”.

¿Quien no conoce a alguien que necesita silencio hasta después del café? o todo lo contrario, que se levanta hablando cual papagayo al que tocaron el botón de “on” o encendido. Y pienso, cuan importante es la música en nuestras vidas y cómo nos acompaña.

musica y rosas

Nuestras células son como una comunidad de abejas, me imagino viéndolas cómo deben de reaccionar ante un tipo de vibración u otra. Si le ponemos a Vivaldi ¿cómo creeis que resultará lo que cocinan tan laboriosamente? Si las rodeamos de ruidos ¿qué sabor tendrá su néctar?

En nuestras cocinas, hay dos músicas que escuchar. La música interna, qué escucho, qué me digo y cómo me lo digo y, por otro, lo que del exterior permito que resuene con este enjambre tan bien ordenado que soy.

Actualmente, si hay algo a lo que estamos sometidos es al ruido externo. A veces, ese ruido externo aturde tanto que no logramos escuchar la música interior…o su silencio. En ocasiones, olvidamos recordar que en el fondo no somos más que un miembro de una super cocina y si no escuchamos, difícilmente podremos hacer un buen potaje; simplemente por que el logístico, no habrá hablado con el cocinero y no comprará los ingredientes necesarios, tampoco el pinche de cocina escuchará al chef y seguramente, no elaborará la salsa adecuada para el plato que se está preparando y, entonces, caigo en la cuenta de lo importante que es la escucha. 

Violin

Escucharme, escuchar a mi cocina con el oído interno me lleva a preguntarme qué me está pidiendo. En unas ocasiones quizás me pida a Bach, otras necesita saltar al son de una jota, otras, pide a gritos irse a una jam de jazz.

El saborear estos y otros matices puede ser un ejercicio muy interesante y promete una futura armonía orquestal.

Por experiencia os avanzo, si no lo habéis experimentado ya, que cuanto más escuchas, más te es revelado.

Mi maestro de yoga, Ramon Cases, decía que debíamos regar lo que quisiésemos que creciese en nosotros y al tiempo, nos decía una frase que había extraído de la película “Bambi” y que decía: “si no has de agradar es mejor callar”.

Agradar no es decirte o decirle a otro frases que halaguen o converjan siempre con tu deseo o su sentir, si no que, lo que salga por nuestra boca esté impregnado de Amor. Incluso una riña o un desacuerdo puede estarlo.

Así que hablémonos bien y trasladémoslo  a lo que nos rodea para que la cocina pueda fluir en ese zumbido armónico con todo lo que existe.

Ya no es un secreto que,  a las llamadas de alerta del cuerpo hay que hacerles caso, si no, el cuerpo se da cuenta de que lo ninguneamos a nuestro antojo y deja de avisarnos. Por eso, parad y escuchad atentamente y, si vuestro cuerpo os pide una música, acercaos a ella, a ver qué reacción produce en vosotros y cómo colorea vuestro cuadro ese día.

Os dejo con el deseo de que el ruido externo no os obstaculice el escucharos, y  os permita proyectar externamente la melodía musical que todos llevamos dentro y que frecuentemente oímos muy de lejos.

¿Descubrimos ese abanico de posibilidades musicales y el efecto que tienen en nuestro día a día?

Si te aventuras a hacer el experimento y te apetece compartir lo que viviste, estaremos atentos para nutrirnos de tu viaje y de tu aprendizaje.

Luz y alegría

Tundra

Fotografia Tundra de San Martin

 

Copyright © Tundra de San Martin tundrasblog.com

4 respuestas a «¿Que músicas escuchas en tu cocina?»

  1. La música que encaja en el momento en el que estamos y sentimos nos absorbe y nos aleja de los múltiples ruidos que perturban y distraen. En mi caso, reconozco que la música, no azarosa, sino elegida circunstancialmente, ha sido mi fiel compañera en esta larga pandemia. Con ella he reencontrado la paz y el silencio para recuperar mi vida interior y que mi capacidad creativa creciers. Sin ellas, pandemia y música, no hubiera sido lo mismo.

    1. Manel, no me deja de sorprender tu energía y tu vitalidad…un ejemplo de vida que llama a las puertas de los otros con entusiasmo…a mí me integraste en tu club con un poema, sí El Poema…maravilloso “Elogi del viure”.
      Gracias por seguir amando. Un abrazo

  2. Adoro la musica callada. La que sale de mi interior porque por suerte la tengo. Mi primer ejercicio del dia es oír la musica interior y dedicarme un tiempo a vivir mis primeras emociones del dia. Y asi mi dia compensa por qur ya active lo fundamental.

    1. Una bella manera de empezar el día Montse, darte la mano y no soltarte…eso sí que es empezarlo conectada.Felicidades!!!!

Los comentarios están cerrados.